Esto podría cambiar si tuvieran éxito los esfuerzos para derogarlo a través de una enmienda constitucional, para cambiar la garantía de la 14 ª Enmienda de la constitución que otorga automáticamente la ciudadania a los hijos nacidos en Estados Unidos. Tal cambio no haría nada por reducir la inmigración ilegal, ya que hay poca evidencia de que la motivación de los inmigrantes ilegales que vienen aquí sea para dar a luz en territorio de EE.UU., en lugar de venir buscando trabajo. Los países que no garantizan la ciudadania por nacimiento no han eliminado la inmigración ilegal.
Sin embargo, los estadounidenses pagan $600 dólares al gobierno federal para verificar la ciudadanía en algunos casos, y los gastos legales pueden variar entre $600 a $1,000 mas. Si todos los padres tuvieran que demostrar el estatus de ciudadania de los recién nacidos, este tipo de gastos serian un costo adicional para los nuevos padres.
Debido a que los bebés que nacen aquí hasta ahora son ciudadanos en virtud de la Constitución y la ley actual, los padres no están obligados a hacer nada para demostrar su propia ciudadanía. No hay trámites costosos o burocracia. En efecto, los certificados de nacimiento que muestran que un niño nace en territorio de EE.UU. constituyen una prueba de la ciudadania. Cambiar esto implicaría también crear mas burocracia a través de agencias o departamentos federales.
Un cambio de la ley actual implicaría imponer onerosos costos burocráticos en todos los recién nacidos y sus padres en un momento en que muchos estadounidenses están a favor de menos gobierno, no más. Esta propuesta amenaza con convertirse en el último de una larga lista de costosos sistemas de verificación. Haciendo un simple análisis costo-beneficio no se justifica, y amenaza con ahogar a los americanos en mas burocracia en todas las etapas de sus vidas.